Me llamo María Martínez, pertenezco a una familia que lleva más de 4 generaciones dedicándose a la agricultura, cultivando cítricos, almendros, olivos, viñas y ahora frutas subtropicales. Soy una joven agrónoma con una firme intención desde que empecé a ocuparme de las labores de la finca familiar: mejorar la producción agrícola aplicando técnicas sostenibles que fomenten al mismo tiempo la mayor cantidad de beneficios ambientales en el entorno. Desde pequeña tengo una alta concienciación medioambiental ya que aprendí el valor del respeto a la naturaleza de mi familia, que me lo inculcó. En los últimos años hemos decidido embarcarnos en el cultivo de frutas subtropicales, concretamente de mango, que es un árbol que se adapta muy bien a esta zona, ya que tenemos el privilegio de tener un microclima único en Europa.
Ya de pequeña acompañaba a mi padre al campo mientras él realizaba las labores propias de la agricultura, me encantaba pasar tiempo con él en el campo. Mi padre me inculcó el amor por este “estilo de vida” como me gusta llamarlo. Yo no me cansaba de mirar las plantas y quedar maravillada de lo bonito que es que después de cuidarlas estas te lo agradezcan con alimentos, ¡es algo mágico!. Todo esto me proporcionó un estrecho contacto con la naturaleza se convirtió en mi pasión, por lo que decidí formarme como Ingeniera Agrónoma, agradezco a mi padre sus consejos para elegir esta formación ya que a pesar de las dudas en la adolescencia, fué un total acierto ya que amo mi profesión.
La finca pertenece a mi padre y sus hermanos (Miguel, Ana y José María). Al finalizar mi formación toda la familia depositó su confianza en mí de forma unánime a pesar de mi juventud, comenzando así un reto y una motivación diaria. He adoptado este proyecto como personal, haciendo todo el manejo de la finca de manera ecológica, aportando mi pequeña contribución a la conservación de nuestro ecosistema. Me ocupo de la gestión y el desarrollo agronómico sostenible de la finca familiar de forma autónoma. Desde que el manejo de la finca es ecológico ha aumentado el número de animales autóctonos como camaleones, aves, anfibios y muchos insectos, ¡que ven nuestra finca como un lugar seguro para vivir!
Mi labor en la finca es planificar el manejo técnico, es muy importante prestar atención a los árboles, observar si presentan algún tipo de carencia o exceso nutricional, controlar las plagas de manera eficiente y ecológica, hacer los planes de abonado, estipular las horas de riego y estar pendiente a los tiempos de floración, cuajado y recolección de la fruta, para poder obtener una fruta de calidad.
El equipo de la finca se ocupa de implementar lo planificado, ellos aplican el abonado, controlan el tiempo de riego, realizan el control de malas hierbas mediante la desbrozadora, el tractor o ganado, realizan los tratamientos necesarios y recolectan la fruta.
El sistema de CrowdFarming me brinda la oportunidad de ofrecer mis productos directamente al consumidor final, a personas que aprecian no solo la calidad de la fruta sino también nuestro compromiso de dejar un planeta mejor a futuras generaciones.