Adopta un garbanzal de "Fastuchera" en Cammarata (Italia) y recibe tu cosecha a domicilio en forma de garbanzos y harina de garbanzos ecológicos. Nicola cuidará de tu adopción y le sacará una foto. También podrás descargarte un certificado de adopción y, si quieres, planificar una visita a la finca. No hay compromiso de permanencia: una vez que recibas el producto y si te gusta la experiencia, podrás decidir si renuevas tu adopción.
Adoptas un garbanzal que cultivamos bajo la normativa de Agricultura Ecológica de la Unión Europea. Estamos en proceso de conversión y esperamos obtener el sello en 2011. Los garbanzos sembrados en nuestros campos corresponden a las dos variedades típicas de Sicilia: la «Pascià», más grande y arrugada, y la «Sultano», más pequeña y lisa. La siembra se lleva a cabo en los campos en el mes de enero durante la luna creciente. A diferencia de las lentejas, los garbanzos tienen cierta resistencia a algunas malas hierbas y, gracias a su profundo sistema radicular, se adaptan bien a condiciones climáticas difíciles como la sequía. Sin embargo, cada año es necesario realizar una escarda manual en el campo para reducir la presencia de todas aquellas plantas (como el cardo mariano, la col silvestre o la centaurea napifolia) que, al proliferar, dificultan su crecimiento. La recolección se realiza en julio, cuando ya se han secado bien al sol y están duros por dentro. Por último, en septiembre, se seleccionan y se empaquetan en bolsas de papel de 1 kg. Además, los destinados a la producción de harina de garbanzo, utilizada en Sicilia para la preparación de algunos platos tradicionales, se trituran en un molino de piedra y se empaquetan unos días antes de su envío. Un garbanzal produce una media de 5kg de garbanzos y harina de garbanzos ecológicos cada temporada.
Cada temporada te enviaremos una caja con: 4 x __Garbanzos__ (1kg. bolsas de papel) 2 x __Harina de garbanzo__ (500g. bolsas de papel) La variedad de __garbanzos__ Pascià tiene un sabor intenso y ligeramente aromático y se utiliza principalmente para cocinar. En cambio, la variedad Sultano nos ofrece unos garbanzos más pequeños y perfumados y se cultiva para la producción de harina. Para facilitar la cocción de nuestros garbanzos, deben permanecer en remojo durante al menos doce horas. Resultan especialmente adecuados para la preparación de sopas, falafel o hummus. Una vez cocidos, mantienen la forma, no se desmenuzan y presentan un sabor muy rico e intenso. Si se siguen estas pautas, los garbanzos pueden conservarse durante al menos dos años. Una vez abiertos, se aconseja guardarlos en un recipiente de cristal en un lugar fresco y seco. Respecto a la __harina de garbanzo__, además de muchas recetas veganas, podrás preparar muchos platos tradicionales mediterráneos, como las panelle sicilianas, la farinata de Liguria o la socca de Niza. La harina puede almacenarse durante aproximadamente un año.
¿Cuándo lo recibes?
Enviaremos los garbanzos en otoño, junto con nuestros otros productos, una vez que se haya completado todo el proceso de cosecha y lavado.