
“Tropiterranean” es la unión de dos palabras: Tropical + Mediterráneo. Es una característica que otorgamos a frutas tropicales que crecen en la costa mediterránea.
En Europa el consumidor suele asociar las frutas tropicales a exóticas zonas lejanas, pero no siempre es así. Hay un rincón del sur de Europa donde el mar Mediterráneo juega a ser tropical.
El clima tropical es un tipo de clima cálido (no árido) en el que las temperaturas no varían mucho a lo largo del año. La media anual suele estar por encima de los 18°C.
En estos pueblos de la costa Mediaterranea que encontramos principalmente en el sur de España, se da la climatología para cultivar frutas tropicales de forma natural como los mangos y aguacates.

Las frutas tropicales importadas, aunque sean ecológicas, recorren muchos kilómetros en barco o avión hasta llegar a la mesa de un consumidor en Europa. Estas frutas son recolectadas semanas antes de su consumo y se transportan en cámaras frigoríficas, perdiendo calidad organoléptica y aumentando su huella de carbono.
Las frutas tropicales Tropiterranean se cultivan por agricultores en Europa, viajan menos tiempo y recorren menos kilómetros. Además la normativa europea de Agricultura Ecológica ofrece un sello de calidad reconocido para el consumidor europeo.
La venta directa permite a los agricultores de fruta Tropiterranean la recolección bajo demanda. De esta forma los mangos y aguacates se recolectan del árbol bajo pedido y se envían directamente al consumidor final sin aplicarles tratamientos de maduración artificial.
Tropiterranean son mangos y aguacates locales, cultivados en zonas de Europa con un clima donde el sol dora durante todo el año frutas exóticas y calienta los corazones de la gente que los consume.